El Dragón, ser temido y venerado simboliza el poder creativo, la protoenergía ,la energía primaria, luminosa, espiritual, activa y fuerte.
El cielo, para la antigua tradición china y según dice el I`Ching está representado por seis lineas yang que representan a seis dragones atados entre si.
Son seis peldaños que conducen al cielo de la realización.
Así cada peldaño no es un obstáculo sino la preparación para el siguiente y cada tiempo que debemos vivir es justamente la preparación para el próximo. Así el tiempo no constituye un obstáculo, sino el medio para la realización de nuestras posibilidades y nuestro destino.
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El dragón, es la energía vital que debe ser controlada , domesticada y puesta al servicio de la conciencia.
Esta es la función del santo que representa a la mente consciente interviniendo decidida ante la amenaza que el dragón oculto lleve a la mente inconsciente o intuitiva representada por la princesa a una cueva de la cual no podrá salir y en la que se verá rodeada de una oscuridad permanente.
Por esto San Jorge facilita con su decisión, elevación y perseverancia la transformación de esta proto-energía descontrolada en "logro" la rosa:
la rosa roja símbolo milenario de los deseos cultivados y desarrollados a través del esfuerzo personal y de las expresiones del amor que organizadas llevan al éxito y la felicidad.
Según mi percepción personal, esta especial historia que se festeja hoy nos recuerda que:
La acción perseverante de nuestra parte sabia o santa sobre la energía creadora, produce un resultado que nos permite obtener aquello que corresponde a nuestra naturaleza, aquello que nos pertenece y hace nuestra dicha como un estado duradero.
Interesante análisis...estoy de acuerdo y además pensando en los detalles de la historia tal cuál se cuenta en Catalunya agregaría: que el dragón, energía vital (como la Kundalini,) es vencida por la mente conciente, el héroe San Jorge, que luego de haber herido a la bestia la liga y se la entrega a la princesa (el subconsciente) para que ella la guíe hasta la salida de la ciudad. Según la leyenda, la princesa consigue dirigir a la bestia mansa y asustada, al igual que el subconsciente, en concordancia de la previa acción de la mente conciente, coseguirá redirigir esta energía vital para que se sublime en lo que simboliza la rosa: los deseos cultivados, es decir, la energía creadora redirigida a lo positivo con la capacidad de crecer y florecer.
ResponderEliminarEn resumen: Mente consciente y subconsciente trabajan juntas para conseguir dominar y sublimar la energía vital y creadora.